Amelia Quintero es ingeniera técnica aeronáutica por Madrid y tiene un máster de ingeniera aeronáutica por León, pero es andaluza, de Huelva para más señas, y volver a la tierra para trabajar como directora del Aeropuerto de Córdoba le ha hecho especial ilusión. "Aunque por motivos laborales me he tenido que que mover por todo el territorio nacional, e incluso también he tenido en alguna ocasión de trasladarme fuera, la tierra tira mucho y es una gozada estar aquí". Reconoce que ha 'aterrizado' en un momento muy bueno para el aeródromo cordobés, tras la labor realizada por su antecesora Sonia Martín, pero todavía tiene cosas que hacer en esta infraestructura que cada vez más se empieza a ver como necesaria para la ciudad y para el resto de la provincia.
Personalmente se quiere mover para mejorar la experiencia a los pasajeros, pero sin olvidar nunca la línea de trabajo para que el Aeropuerto se atractivo para las compañías dentro de su área de influencia y con sus rutas naturales que son Barcelona, Baleares, Canarias, Valencia, Bilbao, y Madrid (como hub), pero también Londres y París. Lo que depare el futuro a esta instalación va a depender, como insiste ella, en que haya demanda y éste se genera a base de 'vender' en todas partes el Aeropuerto con una buena campaña de marketing.
Usted viene de dirigir el Aeropuerto de Albacete, ¿Qué diferencia hay entre ese aeropuerto y el de Córdoba?
Mucha. Aunque parezca aparentemente que es poca, porque son dos aeropuertos de grupo 3, el de Albacete es una base aérea abierta al tráfico civil. Aquí en Córdoba es cien por cien civil. Ahí radica la diferencia principalmente. Además, en Albacete la actividad que se tiene en aquel aeródromo está muy centrada en la actividad cinegética. De caza. Y así tiene una operativa muy marcada, que es cuando se abre la veda. Generalmente, abarca desde los meses de noviembre a febrero. Eso implica que hay una estacionalidad muy marcada. Aquí, por ejemplo, en Córdoba, no. Es más continua. En Albacete no hay implantadas todavía escuelas del vuelo, y aquí en Córdoba tenemos implantadas distintas escuelas de vuelo, con bastante repercusión. Por tanto, realmente hablamos de distintos distintos aeropuertos con distintos negocios, pero en cualquier caso necesarios, como digo yo.
Es curioso lo de la actividad cinegética de Albacete, porque tengo que aquí en Córdoba, en tiempos, había aerotaxis precisamente para venir a cazar. No sé si eso se va a mantener.
Aquí sí que es verdad que una de nuestras líneas de clientes, por decirlo de alguna forma, siguen siendo los aerotaxis. La aviación privada la seguimos manteniendo. Por lo tanto, sí. Nosotros, cuando tenemos ese tipo de operativas, no sabemos muy bien el motivo por el que vienen a la provincia, pero cuando son en esas épocas de caza, entendemos que vienen a realizar esa actividad.
Una curiosidad personal: ¿Para ser director de un aeropuerto, qué hay que ser? Quiero decir que usted es ingeniera aeronáutica. ¿Todos los directores de aeropuertos lo son o cómo se llega a eso?
No es requisito indispensable ser ingeniero aeronáutico, pero bueno yo tengo mucha confianza en mi empresa, en la selección de personal para dirigir un aeropuerto. Al final son ellos los que determinan el perfil de la persona que tiene que liderar, que tiene que dirigir. No necesariamente tiene que ser ingeniero o ingénito técnico aeronáutico, porque al final el director del aeropuerto es el líder del aeropuerto, y aunque esa persona sea la cabeza visible, es igual de importante el equipo humano que tiene detrás. Entonces, no necesariamente tiene que ser ingeniero aeronáutico porque tienes gente que sabe de todo.
De acuerdo, pero tiene que tener alguna relación con la aeronáutica de alguna manera ¿No?
Sí. Pero bueno que yo esté en el Aeropuerto de Córdoba, Málaga o Sevilla, da igual, porque al final AENA es una red de aeropuertos. Y si tenemos una duda en Córdoba levantamos el teléfono y preguntamos a Palma de Mallorca si hace falta, o preguntamos a Madrid. Somos una red de aeropuertos que nos apoyamos entre nosotros. Porque seas ingeniero aeronáutico no lo sabes todo y es lógico que te surjan dudas, y además, cada cada aeropuerto es distinto. Frente a eso tenemos la tranquilidad de que contamos con una red de contactos enormes y los compañeros nos resuelven inmediatamente cualquier problema.
Antes de meterme en materia del Aeropuerto, otra curiosidad: Como ingeniera aeronáutica y como ingeniera técnica aeronáutica, ¿no le llama lo aeroespacial?
Pues, a ver. No necesariamente. Sí que ésa es la creencia que hay: Que los que vamos a estudiar aeronáutica, queremos salir diseñando aviones ¿No? Pero no necesariamente es así. La verdad es que el mundo aeroportuario es fascinante, es maravilloso; una vez que lo entiendes y te atrapa no puedes salir de él como ocurre en mi caso y la verdad es que no están reñidas una cosa con la otra Te pueden gustar los aeropuertos y te pueden seguir gustando todo lo que son aeronaves, motores, incluso materiales. Pero yo personalmente, y hablo por mí y por mis compañeros que estudiaron conmigo en la especialidad de Aeropuerto, una vez que te gusta, lo tienes claro y no te quieres ir a otro sitio.
Engancha, vamos.
Lo que pasa es que el hecho de trabajar en un aeropuerto te da la opción de poder moverte por distintos aeropuertos y poder aprender más. Abrir el abanico de posibilidades. Pero bueno, también tienes que querer, evidentemente. No por el hecho de que tengas que trabajar en aeropuertos te tienes que estar moviendo continuamente. Yo sí, porque mi forma de ser me ha llevado a a moverme mucho, pero no necesariamente tiene que ser así.
¿En cuántos aeropuertos ha estado?
Unos cuantos, pero no sé el número. Empecé primero en Valencia. Después me fui a Madrid; luego, a Fuerteventura; otra vez a Madrid; Sevilla; Málaga; volví a Sevilla; Jerez de la Frontera; Albacete y ahora a aquí. Tengo que decir que la mayor parte de mi trayectoria profesional la he llevado a cabo en empresa privada, durante 15 años, y en mis últimos seis o siete años de carrera profesional ha sido ya en AENA, en los últimos tres aeropuertos citados: Jerez, Albacete y Córdoba.
En cualquier caso, tienes usted una visión de cómo está la aeronáutica del país suficientemente amplia. ¿Cómo estamos? ¿Hemos tocado techo? ¿En qué situación estamos?
No, no, no. Esperemos seguir creciendo (se ríe). Ahora mismo la verdad es que estamos rompiendo estadísticas, porque estamos teniendo unos datos de tráfico que nadie se los imaginaba. De hecho, en pandemia, que ya estaba yo en AENA, eran todo dudas y se hacían estudios para calcular en que año íbamos a recuperar el tráfico. Y se decía que para 2024 esperábamos recuperar el 50% del tráfico de 2019. Pero hemos salido de la pandemia y nos hemos puesto todos a viajar por todo el mundo, y las previsiones iniciales saltaron por los aires. Ahora mismo algunos aeropuertos están sobrepasados por el exceso de tráfico de pasajeros que les está llegando. Lo cual es muy positivo. Pero no pensábamos que la recuperación fuese tan rápida ni tan numerosa. Es decir que en poco tiempo hemos recuperado el número de pasajeros, pero es que además hemos sobrepasado la cifra de 2029.
Claro, pero ésa es una situación circunstancial a raíz de la pandemia. Han pasado ya unos años de aquello para poder determinar en qué situación estamos ahora.
¿A nivel de AENA o a nivel Córdoba?
Primero a nivel nacional, sí.
A ver, bien. Ahora mismo las instalaciones que tenemos en los aeropuertos de la red son capaces de absorber la demanda. Si bien es cierto que algún aeropuerto puntual sí que necesita alguna ampliación y alguna reforma, pero AENA es lo suficientemente ágil como para abordar esos cambios. Y, bueno, a nivel de Córdoba, igual. Acabamos de terminar una ampliación de terminal. En los años anteriores hemos ampliado la pista, se ha implantado el servicio AFIS, la carta de aproximación o los vuelos instrumentales, que no han sido un trabajo de un día, sino que ha sido un trabajo de años y gracias a eso pues ahora tenemos el Aeropuerto que tenemos.
La realidad es que el de Córdoba se encuentra entre dos gigantes Sevilla y Málaga. ¿Qué sentido tiene entonces el Aeropuerto de Córdoba?
A ver, el hecho de que estemos entre dos grandes, entre dos de los aeropuertos de mayor tráfico, no significa nada. Al final, un aeropuerto atiende a la demanda que genera el área de influencia, que cada aeródromo tiene la suya, y mucha gente nos ve como competidores. Y no es verdad, no competimos. Nosotros no competimos con Málaga ni con Sevilla, ni Sevilla compite con Málaga. Y no es así, porque cada uno tiene su área de influencia. Entonces al final el aeropuerto dependerá de la actividad que genera su entorno. No nos tenemos que ver como competidores, sino, todo lo contrario, como instalaciones complementarias. Al final nos ayudamos. Sevilla genera un tráfico, Córdoba otro y Málaga otro.
Ha hablado antes de las actuaciones que se han llevado a cabo en el Aeropuerto nuestro. Es de suponer que se habrá quedado 'de dulce'. ¿En qué situación está ahora mismo?
Pues, hombre, ahora está en su mejor momento. Tenemos unas instalaciones perfectamente dispuestas para acoger toda esta operativa comercial. Y luego también el personal está totalmente entregado a estos vuelos y a toda esta operativa. Tengo que decir que he llegado en el mejor momento.
Ésa era otra curiosidad que tenía: La situación de los empleados y empleadas del Aeropuerto con la vuelta de los vuelos comerciales.
Lo están viviendo con muchísima ilusión. A mí me gusta mucho hablar con ellos y me cuenta sus experiencias, lo que había antes, las vivencias y tal y me cuentan cosas como que un determinado avión venia de no sé dónde y estacionaba en Córdoba y entonces ellos hacían tal o cual cosa, y ves en la cara de los trabajadores la ilusión con la que están viviendo ellos este acontecimiento, y es un placer poder compartirlo con ellos.
¿Qué más requiere el Aeropueto de Córdoba? ¿Quizá una aduana permanente?
Actualmente no nos ha llegado ninguna solicitud de compañías fuera del espacio Schengen, por lo tanto ahora mismo no necesitamos ser aeropuerto-frontera, porque no nos ha llegado la demanda. Eso funciona así: Si hay demanda, se acomete y se atiende a esa demanda. Si no hay demanda, no actuamos. Bueno, no es del todo cierto, porque sabiendo la gran acogida que está teniendo el Aeropuerto de Córdoba, hemos empezado ya los trámites para implantar eso y ser aeropuerto-frontera. Estamos ya trabajando para que, llegado el caso, podamos atender esa demanda. No obstante, es algo que no depende de AENA y al final los medios los tiene que poner Policía Nacional, porque es su competencia.
¡Ah! Creía que era de la Guardia Civil.
No. Frontera es Policía Nacional.
¿Y qué diferencia hay entre aeropuerto-frontera y aduana?
Realmente la diferencia estaría en si nos llegan o no vuelos de terceros países. En caso afirmativo, el registro que habría que hacer sería fiscal y de aduana. Y en caso negativo, como por ejemplo son los vuelos de Canarias, que vamos a atender a partir del 23 de julio, eso llevaría solamente registro fiscal. Y ahí sí que la Agencia Tributaria delegaría en Guardia Civil. Pero lo que es aduana propiamente dicha es Policía Nacional.
Por la situación geográfica que tiene el Aeropuerto de Córdoba, ¿Para qué tipo de vuelo de visitantes sería mejor? ¿Cuál sería su área de influencia natural?
El área de influencia de Córdoba recoge principalmente la provincia de Córdoba. En los últimos años, los estudios de mercado que hace AENA se basan en un acuerdo con las compañías móviles para que la captación de datos que hacen esas compañías sobre las búsquedas que realizan los pasajeros a distintos destinos también los pueda consultar AENA. Y a partir de esos datos somos capaces de saber qué destinos son los favoritos para los habitantes de determinada provincia. Eso nos ayuda a saber qué zonas o qué rutas son las que más demandan los habitantes de cada provincia. Parece muy novedoso, pero se lleva años haciéndose eso en todo el mundo por parte de empresas que requieren hacer estudios de mercado. En nuestro caso, a través de esos datos, nosotros sabemos dentro de nuestra red de influencia qué destinos son los más demandados.
Lo digo porque, por cultura común, es seguro que Córdoba tiene cierto atractivo para los países árabes. ¿Ve posibilidades en ese posible mercado para Córdoba?
Ahora mismo no la tenemos dentro de nuestro radar como ruta potencial, ¿vale? Pero bueno, vuelvo a decir que esto está vivo. Las tendencias van cambiando. Y si bien es cierto que ahora mismo no están esos países dentro de nuestras rutas potenciales, eso no quiere decir que a futuro próximo se modifique y entren dentro de nuestro ámbito. Pero ahora mismo no están demandadas.
¿Y cuáles son las rutas potenciales de Córdoba?
Al final, todo se canaliza a través de la Mesa del Aeropuerto, que lleva años ya funcionando. Y se canalizó todo a través del grupo de trabajo de la Mesa de Conectividad Aérea, a la cual yo tuve la oportunidad de acudir en la última que se celebró a finales de abril correspondiente al grupo de trabajo técnico. Ahí ya se trabajó sobre las rutas que se habían anunciado en la Mesa del Aeropuerto. Y eran Barcelona, Baleares, Canarias, Valencia, Bilbao, y Madrid, pero como destino final, sino como hub. Y eh territorio internacional sí estaban París y Londres. Insisto en que eso es en base a nuestros estudios de mercado y estamos trabajando en esa línea.
Desconozco por completo si el Aeropuerto de Córdoba es también de mercancías, pero es una posibilidad interesante.
Con esto pasa los mismo que lo que hemos comentado antes de aduanas. Es decir, tiene que haber demanda. Si no hay demanda, no hay negocio. Entonces, a día de hoy no tenemos noticias de ninguna empresa, ningún operador que haya demandado carga o mercancía aquí. Si no existe esa demanda no tiene ningún sentido montar una terminal de carga en Córdoba.
¡Ah! Es decir que habría que montar una ¿verdad?
Claro. Porque nosotros tenemos ahora mismo aquí la terminal de pasajeros. Pero si queremos atender carga como tal, tendríamos que tener una terminal de carga para atender a esa mercancía. Pero, como he dicho antes, tiene que existir la demanda.
Me ha venido a la cabeza lo de las mercancías por la Base Logística del Ejército de Tierra que se está haciendo en Córdoba y que quizá requiera de esa terminal también, aunque desconvoco el papel del aeródromo cordobés con respecto a esa Base.
Tengo que decir que el propio Ejército de Tierra anunció que su actividad no la canalizarían por medios aéreos, ¿vale? Entonces, por ahora no será necesario. Pero bueno, no quita que si el día de mañana surge la necesidad, pues, evidentemente, nos sentaríamos con ellos a hablarlo y veríamos la forma de encajar nuestra actividad civil con su actividad militar. Estamos para ayudarnos.
Además viniendo de Albacete ya tiene usted experiencia al respecto.
Exactamente. Pueden coexistir ambas y puede haber negocio. Pero tanto para la carga civil como la militar tiene que haber demanda. Al final, esto funciona así. Sin demanda, no hay negocio.
¿Qué planes tiene usted personalmente para el Aeropuerto como directora?
Dese el punto de vista de conectividad, que para mí es lo más importante, seguir trabajando con toda la Mesa Técnica, como ya lo veníamos haciendo, y con todas las instituciones y entidades que están promoviendo todo lo que es el turismo y el negocio en la provincia. Es fundamental dar a conocer la provincia y dar a conocer el Aeropuerto. Tenemos que darnos a conocer, continuar con el trabajo que estamos haciendo, que ha costado mucho arrancar, y seguir en esa línea. También desde AENA les facilitamos estudios a las compañías de casos de negocio que llamamos nosotros. Son estudios de mercado que le hacemos personalizado a las compañías para que vean un aeropuerto. Eso también lo hacemos nosotros desde nuestro departamento de marketing y seguiremos facilitando ese trabajo a las compañías para hacer el destino Córdoba más atractivo de la que ya es.
Desde el punto de vista de infraestructuras ahora mismo atiende perfectamente a la demanda que tenemos incluso de un incremento futuro. Pero como meta personal tengo mejorar la experiencia del pasajero y sería hacer mejoras en el parking del Aeropuerto y otras pequeñas mejoras como acondicionar el mobiliario para el edificio terminal, pero, en definitiva, todo enfocado a la experiencia del pasajero. Pero ahora le doy más importancia tal vez a la conectividad.
Pero yo pensaba que el hecho de dar a conocer el Aeropuerto dependía más bien de las administraciones, como el Ayuntamiento o la Diputación.
Claro, claro. Ellos forman parte de la mesa técnica, al igual que AENA. La parte que le correspondería a AENA es la de realizar inversiones puntuales para mejorar la experiencia del pasajero y también lo que he comentado antes de la recepción de rutas y la realización de casos de negocios para compañías. Pero eso lo hace AENA, porque tiene medios, tiene conocimiento y tiene experiencia. Pero lo que es la promoción del Aeropuerto y de la provincia sin las mesas del Aeropuerto, eso no se lograría. Y ahí está Turismo, ahí está el Ayuntamiento, ahí están todos. Y, por supuesto, está AENA, tanto a través de Márketing Aeroportuario como de la Dirección del Aeropuerto, y al final es un trabajo conjunto.
Y a efectos prácticos, ¿cómo se da a conocer un aeropuerto? ¿En ferias o cómo?
Sí. Nuestro Departamento de Márketing Aeroportuario va a las ferias internacionales, además de a Fitur y a los encuentros de Turespaña.
Pero la labor de marketing es global por parte de AENA. Es decir que no puede destacar a un aeropuerto y dejar a otro al margen ¿No?
Es que no sólo acude AENA. Va también la gente de Turismo de la Junta de Andalucía, y me consta que sí, que venden Córdoba y venden los aeropuertos de Andalucía, y lo venden bastante bien.
No tenemos nombre en el Aeropuerto, y la verdad es que una infraestructura sin nombre queda un poquito fría. ¿Le gusta el nombre de Julio Romero de Torres cómo han propuesto?
(Se ríe). A ver, yo no puedo entrar a decir sí o no. No depende de AENA poner un nombre a un aeropuerto. Depende del Ministerio, en concreto de la Dirección General de Aviación Civil. Entonces, sería la unidad proponente la que haría llegar esa propuesta a la Dirección General. Y en caso de que Aviación Civil lo apruebe los gastos del cambio de nombre correría a cargo de la unidad proponente.
¿Lo puede plantear cualquier persona o tiene que ser una administración?
Tiene que ser una administración.
