Como cada año, tras el cierre de temporada del restaurante para preparar la que será la siguiente propuesta gastronómica de cara al próximo otoño, la empresa centra todos sus esfuerzos en la terraza de verano de Arena Bar, el Snack Bar de Celia Jiménez en las instalaciones deportivas de Open Arena.
El verano y sus altas temperaturas hacen poner en valor la terraza del establecimiento, que por su ubicación es de las más frescas que pueden encontrarse en Córdoba para pasar una velada entre amigos y familia. Para ello han elaborado una carta con gran variedad de entrantes nuevos para compartir y una serie de cortes de carne a las brasas especialmente escogidos por nuestra chef por su calidad y jugosidad.
Entre la amplia propuesta de entrantes hay algunos platos ya conocidos, pero actualizados, como la ensaladilla rusa, que en esta edición se sirve con mayonesa de piparras, ventresca y piquillos caramelizados, la ensalada de pollo en escabeche con hummus de cilantro y tomatitos asados, las bravas Arena, crujientes y bañadas en salsa de tomates secos y espuma de ali-oli y las croquetas cremosas, con relleno de pollo asado.
Junto a ellos aparecen otros platos nuevos como la ensalada de bimi asado a la brasa, el tartar de salchichón o los chicharrones fritos con guacamole y pico de gallo. También muy recomendables las setas aliñadas a la brasa, las gyozas caseras, las gambas de cristal fritas con huevo o el brioche de pulled pork, entre otros.
En el apartado de carnes, los cortes escogidos destacan por su jugosidad e intensidad de sabor, lo que unido al aroma que les confieren el horno de brasas, los convierten en la opción perfecta para cerrar una estupenda cena. Destaca en este apartado la presa ibérica, magníficamente trabajada por Celia, y el lomo bajo de ternera, una pieza de medio kilo que se sirve con verduras y patatitas asadas.
Pero para los más atrevidos y que prefieran un toque más oriental, recomiendan encarecidamente el magret de pato con verduras chop-suey. Y si la preferencia es pescado la nueva carta incluye un pulpo con rebozado crujiente y bacalao confitado con tomate y ali-oli de ajonegro.
Por último, en el capítulo de postres está el ya clásico pastel de chocolate caliente, que en esta versión se acompaña de un helado casero de vainilla bourbon y caramelo salado de cacahuete, un brownie de nueces con espuma caliente de Nutella y helado de plátano asado y el pionono de canela. Cierra el capítulo de postres un cheesecake con frutos rojos.
