Este fin de semana, la localidad de Dos Torres, en el Valle de Los Pedroches, va a estar literalmente 'tomada' por 540 personas que quieren ganar la XI edición del Gran Juego de la Oca. Un evento que realmente engancha. Tanto es así que una parte muy importante de los participantes repiten de años anteriores. Y una actividad que puede ser exportable, y, de hecho, hay localidades del país que ya han contactado con la organización para ver si se puede trasladar a sus particulares rincones.
El presidente de la junta directiva que organiza los juegos, Dionisio 'Pocho' Cuenca, habla de que ya han contactado con ellos desde Mérida (Badajoz), Guarromán (Jaén) o de Espejo (más cerquita). Allí quieren poner en marcha algo similar a lo que hacen en Dos Torres desde hace 11 años. Y quizá lo más llamativo es que incluso de una capital de provincia, Valladolid, han pedido que les ayuden a organizar el juego en su ciudad, que es casi 124 veces mayor que el municipio cordobés.
"Ayuda como tal, no podemos, porque es mucho trabajo, pero les dije que vinieran a ver cómo lo hacíamos nosotros y estudiar si podían planificarlo a una escala mayor para su ciudad, y de hecho el de Valladolid es uno de los equipos que compiten este año en el Gran Juego de la Oca", ha señalado Cuenca.
El presidente asegura que no le molesta que les quieran copiar. "Si nos piden permiso y lo hablamos en junta directiva y vemos que no es perjudicial para nosotros, porque se haga en otra ´poca diferente, lo podemos exportar". Pero sí le enfadaría (y con razón) que alguien lo hiciera sin pedirles permiso y coincidiendo en fechas con Dos Torres. De todos modos, el secreto del éxito en el municipio cordobés está en sus más de 300 voluntarios procedentes de todo el país (Córdoba, Cádiz, Huelva, Málaga, Sevilla, Granada, Jaén, Ciudad Real, Badajoz, Toledo, Cáceres, Madrid, Valencia, Mallorca y Barcelona). "Esto sale adelante gracias a los voluntarios, y buscar voluntarios tan voluntariosos (nunca mejor dicho) como los que hay en el Norte de Córdoba es muy complicado si se quiere hacer un evento de estas características fuera".
Lo de los voluntarios tiene su explicación. Como se ha indicado, el Gran Juego de la Oca "engancha" literalmente. Y si se ha participado antes, pero el equipo no ha podido competir, regresan como voluntarios y viceversa. Es el caso de un grupo de enfermeros de toda la provincia que se organizaron desde el Hospital de Pozoblanco, que han estado ya colaborando y este año han vuelto para participar divididos en dos equipos que compiten.
De hecho, la participación ha subido, desde los 52 de 2023 hasta los 60 actuales y eso que 15 grupos se han quedado fuera, porque había 75 que querían participar. De los 52 del año pasado repiten todos salvo uno. De la comarca de Los Pedroches son aproximadamente el 60% del total. También vienen del resto de Andalucía y equipos completos 100% de la ciudad de origen son tres: Barcelona, Valladolid y Asturias. El resto tiene componentes de muy diversos orígenes, y eso "es lo que más me gusta de todo, que estén tan repartidos en un mismo grupo".
De todos modos, el crecimiento del juego algún día tendrá que parar. "Vamos año tras año viendo cómo evoluciona y cómo funciona el juego con los tiempos y demás, porque llegará un momento en que el tablero no soporte el peso de tantos competidores y hasta ahí habrá que llegar", ha señalado.
Este año, por ejemplo ya han tenido que modificar la prueba inicial por la cantidad de equipos que hay. Se va a celebrar en dos 'estadios' muy próximos el uno del otro, en la Avenida Torrefranca, "para que vaya más fluida", y ésa es una de las novedades para la edición de 2024. Otra es que si antes ls equipos los formaban ocho componentes en este a ocasión habrá un noveno, llamado el 'ocamunity manager', que se encargará dude registrar y documentar la evolución de su equipo por el tablero en redes sociales con fotos, reels, subida de imágenes a Instagram y demás.
Hay una tercera novedad que es meter un juego dentro del juego. 'Pocho' aplica que con ellos se busca que los equipos interactúen entre ellos. Se denomina 'Huevo roto; tuvo entero', y cada equipo recibe un sobre cerrado con el nombre del equipo con huevos dentro, que puede estar rotos o enteros. "El objetivo es intercambiar el huevo con otro equipo, sabiendo que hay 30 huevos rotos que penalizan y otros 30 que bonifican tiempo, de modo que nuestros concursantes tienen que sacar su espíritu de comerciantes e intentar cambiarlo sabiendo lo que tienen ellos, pero sin saber lo que tienen los demás".
El éxito del evento también está en su organización. La junta directiva está compuesta por 10 personas que cada año se estrujan las meninges para que el tablero y las pruebas no se repitan. "Es nuestro principal reto para que esto no se estanque, pero somos un grupos de personas muy creativas que llevamos pensando en esto desde abril pasado, dedicando todas las tardes tres horas para que todo salga bien y fluido.
Evidentemente, para alojar a tantísima gente se han cubierto absolutamente todas las plazas de camas de Dos Torres. "El hotel y las casas rurales están llenas, y hemos tenido que tirar de gente que alquilaran sus casas, y también de pueblos colindantes como El Guijo, Añora o Pedroche, porque buscamos hacer comarca", asegura Dionisio Cuenca.
Y lo consiguen. "Esto tiene rentabilidad para nuestro pueblo y los de alrededor", asegura. Este año el presupuesto es de casi 45.000 euros. "Un dineral que hay que buscarlo por todas partes" y ahí entran la Diputación, el Ayuntamiento o Covap. Pero también hay más de 70 empresas que aportan pequeñas cantidades de 100 o 200 euros. "Y con esas inversiones, el pueblo se mueve y beneficia incluso a la comarca". Hasta los premios van igualmente en beneficio de empresas locales, porque son casas rurales o vales de comida y productos de establecimientos pedrocheños. La combinación perfecta.
