Andalucía Entre Tod@s pide un protocolo para las fuentes patrimoniales con una protección específica
Andalucía Entre Tod@s (AeT) ha reclamado, a través de un comunicado público, al Ayuntamiento de Córdoba la puesta en marcha de un protocolo de protección de las fuentes patrimoniales y singulares de la capital, a raíz de lo ocurrido con la de la Plaza de La Magdalena, pero no solamente por ese caso, ha advertido su portavoz, Manuel Ortega.
El de La Magdalena ha sido un "suceso extrañísimo", donde una fuente monumental de estilo Barroco de medidas del Siglo XIX se trasladó desde un lugar cercano a la Muralla hasta esa Plaza, e implosionó, según los técnicos de Emacsa, y el vaso se abrió en pétalos. "Es una situación insólita y deben determinarse las causas por las que se ha producido semejante hecho", ha considerado Ortega.
Para el portavoz del partido, lo ocurrido lleva a una situación de tiempo atrás, y que es "la necesidad de que se establezca una protocolo de actuación y seguimiento y un registro de fuentes patrimoniales", que sigue sin haberlo.
En este asentido, Manuel Ortega ha recordado la fuente de la Puerta de Baeza, que está por completo "pintarrajeada con grafitis y deteriorándose a ojos vista", a pesar de ser un elemento patrimonial con protección. "No se ha hecho nada, ni siquiera tras las denuncias pertinentes presentadas para su recuperación, lo que es indicativo de una cierta dejación en el Ayuntamiento".
De igual modo, está la fuente de Las Tendillas que tiene "filtraciones constantes, y no se han resuelto". El caso es que más allá de la perdida de agua no se sabe si hay más riesgos, pero existen otras fuentes dañadas, como la de Santa Marina, que tiene el vaso roto, o la del Paseo de la calle de las Fuentes, que es una conexión de distintas vías con varias fuentes paralela a la Ribera, y que era un espacio verdaderamente singular y pintoresco para disfrutarlo, aunque, a día de hoy, "se encuentra en un grado de abandono y deterioro evidente".
Desde AeT se reclama al Ayuntamiento, al igual que se ha hecho con la protección de los árboles singulares de la ciudad, "que, aún así, están cayendo una a uno y no se está actuando en ningún sentido para evitarlo", un protocolo de protección de las fuentes patrimoniales y singulares de la capital, "porque lo requiere", con un tratamiento específico que impida lo ocurrido en La Magdalena.
Por el momento, la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU), que tiene las competencias en esta materia "se ha mentenido de brazos cruzados, "y eso demuestra que el Plan Especial de Protección del Casco Histórico (Pepch) existe sobre el papel, pero no está en la realidad".